
Vaya desde aquí, por un lado, mi felicitación a los ganadores, y por otro (sobre todo), mi pequeño homenaje a este grupo de excelentes jugadores que tantos y tantos buenos ratos nos están dando. Solo resta decir "gracias, chavales, sois magníficos, muchas gracias".
Mientras tanto y por si salen los agoreros de siempre, que no se olvide nadie de los otros "chicos de oro" menos conocidos, sí, pero igual de grandes. Y por si no basta, siempre nos quedará Estoril.
0 comentarios:
Publicar un comentario